Los pueblos guaraníes (indígenas nativos de algunos países de Sudamérica) perfeccionaron los métodos de recolección y preparación del mate, y la forma de tomarlo, colocando las hojas en una calabaza con agua y sorbiendo el líquido mediante bombillas hechas de caña.
La palabra “mate” viene del guaraní “Caá-mate”: “Caá” sería planta o hierba, y “mate” se refiere a la calabaza donde la bebían.
Contaban una leyenda en la que sus ancestros recibieron la visita del dios Pa’i Shume, quien les enseñó cómo cosecharlo y prepararlo. “La más verde de todas las plantas” les traería salud, vitalidad y una larga vida. Según la leyenda, estos conocimientos fueron pasados por un chamán a la tribu, donde se encontraban Jary y su padre enfermo, que al recibir el brebaje encontró nuevas fuerzas y vigor para seguir el camino de su pueblo.
Creían que al beber mate bebían el poder de la selva.
¿Qué mejor poción para acompañarte a lo largo de tu día?
Bình luận