¡Queridas! Hoy os traemos a una bruja que revolucionó el mundo de nuestro tan atesorado Rooibos.
Annique Theron (Transvaal, 1929 - Pretoria, 2016) fue una mujer de negocios sudafricana conocida principalmente por su línea de productos relacionados con la salud y la cosmética utilizando el Rooibos como principal ingrediente.
La aspiración de Annique, frustrada por la falta de recursos por parte de sus padres para enviarla a la universidad, era ser doctora.
Más tarde, cuando ya era madre, quiso dedicarse al mundo de los negocios.
En 1968, Annique decidió calentar y añadir Rooibos al biberón de su hija, que era un bebé con problemas de salud, con cólicos y fuertes reacciones alérgicas (incluso a la leche materna). La condición de su hija mejoró muy pronto, y Theron, achacándolo al Rooibos, se propuso mostrar al mundo los beneficios medicinales del Aspalathus Linearis, ese arbusto sudafricano del que procede el Rooibos, y que muchas adoramos por sus poderes relajantes, antiinflamatorios, antihistamínicos y digestivos, además de por la ventaja de no tener teína y poder tomarlo a cualquier hora del día, combinado con infinidad de ingredientes o solo (ya que si por algo nos tiene especialmente enamoradas es por su delicioso sabor).
Annique inició así su investigación entorno a esta hierba medicinal maravillosa, sus propiedades, y sus usos.
Recibió dos medallas de oro en 1997 por parte de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, además de ser nombrada "Inventora Femenina del Año" (título al que habría que darle una vuelta, en nuestra opinión).
Tenía 72 años cuando se sacó su doctorado en Medicina Alternativa, cumpliendo en cierta manera su sueño de ser doctora.
Por supuesto, toda luz tiene su sombra, y habría que reflexionar (siempre sin olvidar contextualizar) sobre la prioridad que dio Annique al negocio de la cosmética (sobre todo enfocado a la preservación de la juventud de las mujeres), y sobre otras tantas cosas (ya sólo el contexto de su vida, su localización, da para analizar la historia de la República Sudafricana y los horrores del colonialismo).
Os dejamos, queridas, con el nombre de otra mujer olvidada, con temas en los que indagar, sobre los que debatir y pensar, y con la curiosidad (esperamos) encendida. ¡Atentas, que seguimos! 🧡